La región de Midi-Pyrénées destaca sobre todo por los impresionantes escenarios naturales de la Cordillera Pirenaica. Esta región se encuentra entre Aquitania, la frontera española y la región oriental de Languedoc y Rosellón. Incluye los departamentos administrativos de Lot, Aveyron, Tarn-et-Garonne, Tarn, Gers, Haut-Garonne, Ariège y Hautes Pyrénées. Esta es una tierra de llanos punteados de colinas, estrechos de arena, bosques de amarra y pino, mesetas solitarias cubiertas de grutas mágicas, y pequeños valles cubiertos de bosques impenetrables. La parte del noreste es una tierra áspera, montañosa, conocida como el Rouergue. Se sitúa en la frontera de Aquitania, formada por la meseta del Causse, donde los animales y las aves de caza se alimentan de tomillo y enebro, que crecen salvajes en el suelo cretáceo. Consecuentemente, estos pequeños animales y pájaros tienen un sabor muy particular. La principal ciudad es Rodez, que como conjunto es considerada como una de las maravillas de la arquitectura gótica francesa. Su gran torre roja, domina las estrechas calles que se confunden con las pequeñas plazas, desde aquí se pueden obtener vistas hermosas de la meseta del Aveyron, un paisaje majestuoso y rígido con afloramientos de granito y barrancos escarpados. Las aldeas y los cortijos, construidos con la roca local, imitan a menudo las formaciones de roca hasta el punto de no ser reconocibles por los turistas.
En el sureste se encuentra Millau que es el mejor punto de entrada para acceder a las gargantas del río Tarn. Hacia el sur está Roquefort, cuna de uno de los quesos favoritos de Francia. Aquí sopla un viento frío y húmedo que ha dado origen al "queso de los reyes y el rey de los quesos". Existen muchas cuevas en las que se almacena el queso, que se pueden visitar y en las que se pueden realizar degustaciones. Auch era la antigua metrópolis romana de Novem Populena, una de las ciudades más importantes de Galia, rivalizó largo tiempo con Burdigala (Burdeos) en importancia. La catedral tiene dos torres jesuítas, un coro tallado en roble sólido y una ventana de cristal vielado del siglo XVI. La gente de Auch ha erigido una estatua al Vrai d'Artagnan (el verdadero d'Artagnan), el famoso mosquetero de gasconia inmortalizado por Dumas. Cahors, situada en una península formada por el Río Lot, tiene un famoso puente, Pont Valentré, con seis arcos y tres torres de defensa de 40m de alto sobre el río. Es el palmo de río fortificado más magnífico que ha sobrevivido en Europa. Su construcción comenzó en 1308. La leyenda cuenta que el trabajo de construcción estuvo plagado de problemas y el puente todavía seguía inacabado después de 50 años. Entonces uno de los arquitectos hizo un pacto con el diablo y el puente fue acabado sin ninguna otra complicación. Una figura pequeña del diablo sigue siendo visible en la torre central. Un fino vino tinto muy oscuro lleva el nombre de Cahors. Se hace con las uvas de la variedad de Amina traída desde Italia en las épocas romanas. Toulouse es una de las ciudades más interesantes de Francia. Por una parte es una ciudad universitaria, por otra es el centro y mercado principal de una zona agrícola. Además tiene bastantes industrias de tecnología avanzada y una vida social y cultural muy sofisticada. Durante la Edad Media se explotaron las minas de piedra de la región y la ciudad fue construida con un ladrillo rojo que parece absorber la luz. Es por estoque se la llama la Ville Rose, la ciudad rosada y dicen que se ve rosa cuando amanece, roja durante el día y violeta durante el crepúsculo. Hay muchos museos y edificios civiles y religiosos que se pueden visitar. Los más importantes son: el Hotel d'Assezat o Capitole del siglo XVI que sirve de Ayuntamiento; el Museo de los Agustinos; la Iglesia de los Jacobinos que es la iglesia románica más bella de Francia, y también la primera iglesia que se construyó al oeste del Rhône y el Monasterio Dominico< /I> (el primer monasterio fundado por Santo Domingo). Es una tradición entre los toulousinos y los visitantes sentarse a tomar el aperitivo en uno de los muchos cafés de calle. Esta región fue una importante parte del Imperio Romano y estuvo bastante influenciada por los árabes que durante 800 años ocuparon España. Es por esto que la gastronomía que se desarrolló tiene tanto de árabe como de romana. El plato más famoso es el Cassoulet. Otra ciudad situada a la orilla del río Tarn es Albi. Llama la atención el color rojo de los ladrillos usados en muchas de sus construcciones como la Catedral de Santa Cecilia, tan grande que destaca de todas las otras construcciones. Fue construida como fortaleza para proteger al cruel Obispo que impuso la iglesia al pueblo. Dentro hay un vasto pasillo con magníficas estatuas de piedra esculpida. También destaca el Palacio Fortificado del Arzobispo que actualmente es un Museo especializado en obras de Toulouse-Lautrec. La ciudad fue el centro de guerras religiosas (los herejes resistieron a los católicos durante décadas en este lugar). La ciudad de Lourdes es un santuario desde que a mediados del siglo XIX, la pastora Bernadette Soubirous tuviera unas visiones de la Virgen María. Además de la cueva hay un castillo y un museo.